¿Qué son las vocaciones Nativas? Son las personas llamadas a la vocación sacerdotal o religiosa en los Territorios de
Misión.
Son el mejor legado de los
misioneros.
Es el fruto de su
testimonio, que se encarna en
una cultura.
Son el presente de las Iglesias locales. Ellas están llevando el Evangelio a su
gente.
Representan el futuro de la
Iglesia. Su formación asegura la solidez de la Iglesia católica y universal.
¿Por qué necesitan ayuda?
Muy a menudo, las vocaciones nativas tienen serias dificultades para seguir adelante en su formación por problemas económicos. La Obra Pontificia de San Pedro Apóstol –una de las cuatro
Obras Misionales Pontificias (OMP)– nació para que ninguna vocación se perdiera por falta
de medios. El Papa asumió esta iniciativa como propia hace 100 años, y es el cauce oficial de
la Santa Sede para sostener a las vocaciones nativas de todo el mundo.
Una Iglesia particular no puede constituirse en una Iglesia implantada, fuerte,
hasta que no cuenta con vocaciones sacerdotales y religiosas propias. Por eso,
apoyar a las vocaciones nativas es una apuesta por el futuro de la misión.